MITO: los intentos de suicidio son una llamada de atención. La persona que quiere acabar con su vida, no avisa.
REALIDAD: Un intento de suicidio es una manifestación del sufrimiento. Muchas personas avisan de alguna forma a su entorno acerca de sus intenciones.
MITO: Hablar de suicidio invita a que las personas tomen la decisión de hacerlo.
REALIDAD: Una información adecuada sobre el suicidio ayuda a la prevención del mismo.
MITO: Las personas que se suicidan son egoístas o valientes.
REALIDAD: La conducta suicida no es cobarde, egoísta o valiente. Está vinculada a un altísimo grado de sufrimiento y desesperación de la persona.
MITO: El suicidio no se puede evitar. Si alguien quiere hacerlo lo hará.
REALIDAD: El suicidio se puede prevenir y evitar. Es esencial la detección temprana de los problemas de salud mental y los recursos profesionales.
MITO: Sólo si tienes preparación puedes ayudar a una persona con riesgo suicida.
REALIDAD: Como persona cercana puedes escuchar y acompañar. Puedes ayudarle a descubrir razones para vivir y un nuevo sentido de si mismo.
MITO: Cuando se mejora después de una tentativa, ya no hay riesgo.
REALIDAD: El riesgo puede seguir presente en las semanas y meses posteriores.
BUSCA AYUDA SI TÚ O ALGUIEN QUE QUIERES:
- Está hablando/escribiendo sobre suicidio.
- Comprando armas/cuchillos o acumulando pastillas.
- Alejándose del contacto social.
- Sufriendo, con desesperación, o cambios severos en el estado de ánimo.
- Realizando conductas autodestructivas y arriesgadas.
- Regalando pertenencias y/o despidiéndose como si fuera la última vez.
Por todo esto, si tanto tú como alguien que quieres está pasando por una crisis y no sabes qué hacer, ponte en contacto con profesionales que puedan intervenir de inmediato, mediante los números de teléfono de emergencias.
También puedes acompañar a tu familiar o ser querido al hospital más cercano.
La prevención es clave y nos concierne a todos.
Te mando un fuerte abrazo.